BEIJING (AP) — China anunció el viernes que dejará de reconocer el pasaporte británico de territorios de ultramar como documento de viaje o forma de identificación válida, en medio de un agrio enfrentamiento con Londres por un plan para permitir que millones de residentes en Hong Kong adquieran permisos de residencia y al final la ciudadanía.
El anuncio del vocero del Ministerio de Exteriores, Zhao Lijian, arroja más incertidumbre en torno al plan apenas unas horas después de que Gran Bretaña dijo que comenzaría a aceptar solicitudes para las llamadas visas BNO a partir del domingo en la noche.
Según este plan, hasta 5,4 millones de residentes en Hong Kong podrían optar por vivir y trabajar en Gran Bretaña durante cinco años tras los cuales podrían solicitar la ciudadanía. La demanda se disparó luego de que Beijing impuso el año pasado una amplia ley nacional de seguridad en la antigua colonia británica tras meses de protestas prodemocráticas.
“El intento de los británicos de convertir a un gran número de gente de Hong Kong en ciudadanos británicos de segunda clase ha cambiado por completo la naturaleza del entendimiento original de las dos partes con respecto al BNO”, dijo Zhao a reporteros en una conferencia diaria.
“Esta medida infringe gravemente la soberanía de China, interfiere gravemente en los asuntos de Hong Kong y en cuestiones internas chinas y viola gravemente la ley internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales”, agregó el portavoz. “China no reconocerá el llamado pasaporte BNO como documento de viaje y prueba de identidad a partir del 31 de enero, y se reserva el derecho a tomar más medidas”.
Muchos ciudadanos de Hong Kong tienen varios pasaportes y no está claro si Beijing puede hacer algo para evitar que entren en Gran Bretaña con el plan de visados. Para proteger la privacidad, una aplicación para celulares permitirá a los solicitantes descargar su información biométrica sin necesidad de ser vistos visitando la oficina de visas británica.
Cuando se presentó antes de que Londres entregara el control del territorio semiautónomo a Beijing en 1997, el pasaporte BNO era una decepción para los residentes en Hong Kong. En ese momento, ofrecía únicamente el derecho a visitar el país europeo por seis meses, sin derecho a trabajar allí ni a pedir la ciudadanía, y los solicitantes debían haber nacido antes de la transferencia.
Con información AP