El Senado aprobó en lo general la reforma judicial propuesta por AMLO, con 86 votos a favor, mientras manifestantes irrumpían en la sesión en la Casona de Xicoténcatl. La tensión sigue en aumento.
En una jornada cargada de tensión, el Senado de la República aprobó en lo general la reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Con 86 votos a favor, la reforma obtuvo la mayoría calificada necesaria para avanzar, a pesar de la fuerte oposición dentro y fuera del recinto.
La reforma, que incluye la elección popular de jueces y magistrados, ha generado un intenso debate desde su propuesta. Para el bloque oficialista de Morena, esta es una oportunidad histórica de democratizar el sistema judicial. Sin embargo, los opositores argumentan que se trata de un ataque directo a la independencia del Poder Judicial.
Manifestantes irrumpen en la sesión mientras se discute la reforma
La sesión se llevó a cabo en medio de protestas, con cientos de manifestantes reunidos en las afueras de la Casona de Xicoténcatl, sede alterna del Senado. Funcionarios judiciales, estudiantes y activistas se unieron en una protesta que rápidamente se tornó violenta. Los manifestantes lograron romper el cerco de seguridad e irrumpir en el recinto, exigiendo la protección de la autonomía judicial.
Dentro del hemiciclo, el ambiente era igual de tenso.
Los senadores discutían apasionadamente la reforma, mientras los manifestantes gritaban consignas como “¡El poder judicial no se toca!”. Las escenas recordaron al asalto al Capitolio estadounidense, y las autoridades desplegaron refuerzos policiales para controlar la situación.
La reforma judicial de AMLO: ¿qué implica para el Poder Judicial?
La reforma judicial promovida por el presidente AMLO busca transformar la estructura del Poder Judicial en México. Entre los puntos más controvertidos está la elección de jueces y magistrados a través del voto popular, lo que, según sus defensores, otorgaría más poder al pueblo. No obstante, los críticos señalan que esto podría politizar el sistema judicial y debilitar la imparcialidad de las decisiones.
Además, la reforma pretende reestructurar varios organismos judiciales y cambiar los procesos de designación y evaluación de jueces, lo que ha sido percibido como un intento de centralizar el poder en el Ejecutivo.
PRD y Movimiento Ciudadano, ha mantenido una postura firme en contra de la reforma, calificándola de peligrosa para la división de poderes. Varios senadores expresaron su descontento durante la sesión, pero la coalición oficialista logró asegurar los votos necesarios.
Las protestas fuera del recinto reflejaron el malestar popular. Durante días, los manifestantes han bloqueado calles y han expresado su rechazo a lo que consideran un ataque directo a la autonomía del Poder Judicial. La situación llegó a un punto crítico cuando los manifestantes invadieron la sesión, generando momentos de alta tensión entre los senadores y la seguridad.
Rumores de traición: Miguel Ángel Yunes y su voto a favor de la reforma
Uno de los momentos más polémicos fue la aparición de Miguel Ángel Yunes, quien había solicitado licencia por problemas de salud. Su regreso sorpresivo levantó sospechas de una posible “traición” dentro del PAN. Finalmente, Yunes votó a favor de la reforma, lo que desató duras críticas, especialmente de parte de figuras como Lilly Téllez, quien lo acusó de “venderse” al gobierno.
El voto de Yunes fue clave para que el bloque oficialista lograra la mayoría calificada de 86 votos, lo que permitió la aprobación en lo general de la reforma judicial. Su decisión ha generado una fuerte división dentro del PAN y ha profundizado la polarización política en el país.
Con información La Verdad Noticias
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