Sentencia del Mayo Zambada: juez adelanta audiencia para enero de 2026

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Sentencia del Mayo Zambada: el juez Brian Cogan adelanta la audiencia al 12 de enero de 2026, donde el líder del Cártel de Sinaloa conocerá su castigo en EE.UU.

La sentencia del Mayo Zambada marcará uno de los primeros acontecimientos judiciales del 2026 en Estados Unidos.

El histórico líder del Cártel de Sinaloa, Ismael Zambada García, recibirá su castigo días antes de lo previsto, luego de que el juez Brian Cogan reprogramara la audiencia que definirá su futuro tras declararse culpable de delitos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas.

Para un personaje que logró evadir a la justicia durante décadas, esta audiencia representa el cierre de un capítulo que ha cambiado por completo el panorama del crimen organizado en México.

La expectativa internacional crece ante la inminente sentencia del Mayo Zambada, pues aún no se conoce con exactitud qué condena recibirá.

Aunque los cargos podrían llevarlo a cadena perpetua, también existe la interrogante sobre si tendrá la posibilidad de regresar a México para enfrentar procesos pendientes. Zambada, de 76 años, mantiene la intención de ser juzgado también en su país, una decisión que podría influir en su colaboración con autoridades estadounidenses.

En agosto pasado, el capo logró un acuerdo de culpabilidad que le garantiza ciertos beneficios, entre ellos un trato penitenciario más flexible y una eventual reducción de pena.

Sin embargo, estas condiciones no aseguran cuál será la sentencia del Mayo Zambada, pues todo dependerá de cómo interprete el juez Cogan el nivel de responsabilidad del acusado en la estructura criminal que lideró durante más de tres décadas. El caso se mantiene como uno de los más relevantes desde el juicio de Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Sentencia del Mayo Zambada: audiencia adelantada en Nueva York

La audiencia para dictar la sentencia del Mayo Zambada se llevará a cabo el lunes 12 de enero de 2026 a las 10:00 horas, un día antes del calendario inicial. Brian Cogan, el mismo juez que impuso cadena perpetua a El Chapo, decidió adelantarla en medio de un contexto que involucra nuevas declaraciones, acuerdos y movimientos judiciales relacionados con figuras clave del narcotráfico.

Ese mismo día también tuvo lugar la audiencia de Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo, quien aceptó que Los Chapitos secuestraron a Zambada el 25 de julio para entregarlo a las autoridades estadounidenses. Este testimonio podría incidir en la lectura final de la sentencia del Mayo Zambada, pues refuerza la ruptura interna en el Cártel de Sinaloa y ofrece nueva información sobre cómo fue que el capo terminó en manos del gobierno estadounidense.

Zambada, conocido como “El Señor de la Montaña”, admitió su papel como líder del cártel en agosto pasado para evitar un juicio completo que habría ampliado la exposición de evidencias en su contra. Su equipo legal solicitó que no sea enviado a una prisión de máxima seguridad y que se le otorgue mayor acceso a su familia, condiciones que podrían influir en la sentencia del Mayo Zambada durante la audiencia de enero.

A diferencia de otros capos extraditados, Zambada no buscará participar como informante ni colaborar con el gobierno estadounidense, según confirmó su abogado Frank Pérez. Este punto también podría tener impacto en la futura sentencia del Mayo Zambada, pues la cooperación suele influir favorablemente en el número de años dictados, aunque en su caso, los fiscales han sostenido que la gravedad de los delitos no puede ser minimizada.

¿Habrá pena de muerte en la sentencia del Mayo Zambada?

Una de las dudas más frecuentes es si la sentencia del Mayo Zambada podría incluir la pena de muerte. Sin embargo, los fiscales de Estados Unidos ya descartaron esta posibilidad. Antes de que el líder del Cártel de Sinaloa se declarara culpable, el Departamento de Justicia presentó un documento judicial donde confirmó que no buscarían esta sanción extrema. Con ello, el abanico de opciones se reduce a cadena perpetua o una pena de larga duración, aunque el resultado final dependerá de la evaluación del juez Cogan.

Aun sin riesgo de pena capital, el proceso sigue siendo altamente complejo. Zambada enfrenta más de cuatro cargos graves, y su presencia en la estructura criminal de alto nivel podría justificar una sentencia severa. Sin embargo, su defensa insiste en que existen factores que deben tomarse en cuenta: su edad avanzada, su estado de salud y recientes indicios de demencia. Estas condiciones, argumenta su abogado, podrían influir en el tipo de penalización que se determine en la próxima sentencia del Mayo Zambada.

El interés por el caso también radica en cómo afectará al Cártel de Sinaloa. A diferencia de El Chapo, Zambada siempre se mantuvo detrás de las sombras, operando con bajo perfil y sin exponerse públicamente. Su captura cambió esa dinámica y dejó un vacío en la estructura criminal que hoy está profundamente fragmentada. La sentencia del Mayo Zambada definirá el futuro inmediato de una organización que ha perdido a sus principales líderes en menos de una década.

Analistas señalan que el juicio también podría proyectar un mensaje político sobre la cooperación entre México y Estados Unidos en materia de seguridad. La extradición de un capo histórico, sumada a la presión que ejercen las agencias estadounidenses por detener a Los Chapitos, convierte la sentencia del Mayo Zambada en un punto clave para medir la capacidad de ambos gobiernos para desmantelar redes criminales transnacionales.

A pocas semanas de la audiencia, el entorno jurídico del caso continúa evolucionando. Los documentos filtrados, los acuerdos de culpabilidad y las recientes declaraciones de los hijos del Chapo han configurado un escenario donde la sentencia del Mayo Zambada no será solo un cierre judicial, sino un evento de impacto político, social y criminal. Al finalizar, quedará claro si el Gobierno de Estados Unidos optará por mantenerlo en territorio norteamericano o permitirá que enfrente cargos en México.

Sea cual sea el fallo, el 12 de enero marcará un antes y un después en la historia del narcotráfico moderno. Para la comunidad internacional, la sentencia del Mayo Zambada representará el fin de una era y el comienzo de una nueva etapa en la lucha contra el crimen organizado. Para México, podría significar un giro en la forma en que se enfrentan los cárteles más poderosos del país.

Con información de La Verdad Noticias.

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