Por: Wolfgang Erhardt, Vocero Nacional de Buró de Crédito
Los otorgantes ven muchos factores, según sus criterios de negocio y de tolerancia al riesgo para determinar si dan un crédito, definir el monto, el plazo y otras condiciones.
El pedir y dar un crédito y el pedir y dar amor se parecen. Todos lo requeriremos, todos lo buscaremos en algún momento, una o varias veces.
Para determinar si una persona prospecto es apto para nosotros lo analizamos pasándola por nuestros filtros de gustos y requisitos que hemos establecido previamente como mínimos. ¿Cuáles tienes tú? ¿La edad, la altura, que la persona sea simpática, de buen corazón, que tenga un buen trabajo…? Generalmente los criterios serán diferentes entre nosotros, pero la verdad es que todos estamos buscando siempre al mejor perfil posible para tener mayores probabilidades de tener un relación bonita, saludable y feliz con esa persona.
Los otorgantes de crédito también establecen sus gustos y requisitos mínimos para establecer relaciones con potenciales clientes o con sus clientes actuales. La belleza física no es un tema que pudiera jugar, como en el caso del amor, pero ¿qué tal los ingresos, el nivel de endeudamiento, la capacidad de pago, su comportamiento de pago, su edad, su nivel de riesgo, su apetito al crédito, etc.? Estos datos los obtienen los otorgantes de crédito de la información contenida en las solicitudes de crédito y de productos de Buró de Crédito como el Reporte de Crédito y el Mi Score, por nombrar solo dos de los más solicitados.
Cuando acudimos a solicitar un crédito nuestros datos y perfil se corren a través de motores de decisión que automatizan y estandarizan los procesos; en caso de ser necesario, las solicitudes también son revisadas físicamente por analistas de riesgo.
De ahí se determina la conveniencia de otorgar un crédito, se define el monto, el plazo y las condiciones más apropiadas para ese solicitante de crédito.
Si deseamos tener buenas probabilidades de obtener un crédito, el ideal sería que fuésemos una persona con ingresos suficientes para poder pagar lo que estamos pidiendo, que nuestro nivel de deuda actual sea sano y que por ello tengamos la capacidad crediticia suficiente para otro compromiso, que tengamos vida suficiente para poder cumplir con el plazo del crédito, y que tengamos un historial de cumplimiento de pago bueno que genere confianza, entre otros. La lista de requisitos y gustos, como en el caso del amor, pude claro ser más extensa y variada.
¿Y si alguna persona u otorgante de crédito no quiere tener una relación contigo en este momento? No te desanimes que en ambos casos hay bastantes de donde elegir.
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