Por Daniel Rangel
Recientemente las autoridades del gobierno de la CDMX y de la Secretaría de Educación Pública presentaron el uso del «uniforme neutro» con la intención de… ¿fomentar la equidad de género en las escuelas de nivel básico?
Aunque inicialmente se «malinterpretó» el uso de este, se ha aclarado oficialmente que es una iniciativa específica para que las niñas puedan usar falda o pantalón por igual.
Incluso antes de que se aclarara, era evidente que se trataba de una propuesta pensada primordialmente en ellas.
Como bien lo sugirió Claudia Sheinbaum, es una iniciativa sencilla, pero impactante. Aunque se puede relacionar al tema de equidad de género, no hay que caer en la trampa metiendo harinas de distintos costales a uno solo. Es un asunto superior a la igualdad y equidad de género, se trata de procurar el bienestar humano.
NO SE TRATA DE IDEAS MODERNAS, SINO DE SEGURIDAD
Hace mucho que las mujeres usan pantalón, y es de lo más normal e incluso sexy. Sea la razón por la que se opte usarlos, hoy podemos dar razones de los beneficios que se tiene al vestirlos; pensemos en circunstancias relacionadas con el clima, la gente mañosa, la mofa, la comodidad…
Creo que la mayoría estaremos de acuerdo en la propuesta del uniforme neutro.
«HAY QUE ROMPER LOS ESTEREOTIPOS DE GÉNERO»
En muchas ocasiones he visto comentarios que pretenden fomentar el «romper» los estereotipos de género. Es muy difícil que realmente ocurra. No podemos deshacernos así nada más de pensamientos ni representaciones con las cuales organizamos nuestra mente; esta necesita orden para entender, aclararse y explicarse.
Por ejemplo, en los baños públicos para diferenciar el de hombres y el de mujeres nos auxiliamos de pictogramas que representan características enfáticas de cada género: un sombrero de copa para el de hombres y un abanico para el de mujeres.
Si nos pusiéramos muy exquisitos, diríamos que un hombre puede refrescarse con un abanico y que una mujer puede usar sombrero de copa si le place, pero sería ridículo debatir y cuestionar al respecto.
Si lo único que nos distingue visualmente es el sexo, sería grotesco colocar unos genitales. Hay otras dos opciones: uno, poner con letra: HOMBRE / MUJER; dos: usar una representación de las características de cada género para diferenciarlos de una manera aceptada, menos polémica y grotesca: un sombrero y un abanico.
Aunque decidieran poner incluso signos neutros como el número 1 en vez de un sombrero y el 2 en vez de un abanico, terminaríamos estereotipando al hacer asociación de ideas. A los signos les otorgamos significados y a estos los relacionamos con otras ideas en semejanza. Así que no, no es tan fácil romper los estereotipos como lo sugieren.
¿USO DE PANTALÓN = IGUALDAD Y EQUIDAD DE GÉNERO?
Los pantalones se han considerado por mucho tiempo una prenda impropia para las mujeres. En el momento que vivimos, diría que hasta es risible pensar que hay gente que cree que su uso es exclusivo para los hombres. Sin embargo, aunque queramos creernos muy liberales y modernos, es una característica que se relaciona con mayor facilidad al estereotipo masculino, y me temo que muy difícilmente eso va a cambiar en mucho tiempo.
El anuncio del uso del uniforme neutro no debe fundamentarse en la equidad e igualdad de género, sino en el bienestar humano. Dejemos de lado que si es hombre o que si mujer, ambos somos humanos; ambos sentimos, ambos somos vulnerables al frío o al acoso, ambos tenemos derechos. Evitemos justificar el uso de este uniforme neutro con un: ¿por qué ellos sí pueden usar pantalón y ellas no? Se trata de pensar en la protección de la gente, en lo que le conviene.
«Sí, Daniel, pero la igualdad y equidad de género es una lucha y debe fomentarse de alguna forma», alguien dirá. Amigo, hay algo superior a este movimiento, hablamos de la salud física y psicológica de la gente. Es como decir que un anciano debe ir sentado en el camión solo por haber servido mucho tiempo al país con su esfuerzo. Hay algo superior a eso, se trata de su integridad, ir parado podría ponerlo en un riesgo muy delicado si llegara a golpearse. ¿Me siguen?
Al gobierno, naturalmente le conviene anunciarlo desde la óptica de la equidad de género porque es un mensaje con el que el pueblo los va a juzgar a bien. No obstante, esto no quiere decir que no es una buena propuesta, lo es.
Por mucho tiempo se mantuvo callado, pero estamos en la época en que se puede exigir con todas las de la ley el derecho al bienestar, no dudemos en ejercerlo.
Ci vediamo
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