Una protesta para exigir que la niña Nickte, de 4 años de edad, fuera regresada a su madre Miztli Granados, terminó en una acción violenta de la policía municipal de Cuernavaca
Una protesta para exigir que la niña Nickte, de 4 años de edad, fuera regresada a su madre Miztli Granados, terminó en una acción violenta de la policía municipal de Cuernavaca, quien detuvo a cinco mujeres y dos hombres en la escultura de La Paloma de la Paz, que se localiza en la entrada norte de la capital de Morelos.
Según la versión de las colectivas, las mujeres habían terminado la protesta y ya se retiraban cuando fueron perseguidas por los policías, las golpearon y arrastraron para detenerlas y subirlas a las patrullas; después les retiraron pertenencias como identificaciones y celulares de los que, aseguran, fue sustraída información personal.
Además, dos hombres que llegaron por las jóvenes manifestantes y que no participaron en la protesta fueron detenidos y acusados de arrollar a un policía, pero nunca presentó los cargos ni las evidencias médicas del daño ocasionado.
La madre de la menor organizó la protesta con apoyo de diversas colectivas, para visualizar que el padre de la menor, Alán Antonio “N”, forma parte de una familia con influencias entre las autoridades policiacas y judiciales, que ha permitido que durante más de 623 días no haya visto a su hija.
Las colectivas anunciaron que hoy viernes presentaran varias quejas en la Comisión de los Derechos Humanos y denuncias ante la Fiscalía de Morelos contra la jefa de la policía en Cuernavaca, Alicia Vázquez Luna, por la forma violenta en la que ordenó la detención de las feministas.
Detallaron que fue debido a la intervención de diferentes funcionarios de los derechos humanos que lograron, primero, ubicar el paradero de las detenidas y, después, liberarlas, pero desconocen si en las siguientes horas puedan ser blanco de represalias.
Con información de Excelsior
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