Después de casi siete horas de debate, la Mesa Directiva en el Palacio de San Lázaro turnó el proyecto por segunda ocasión al Senado de la República.
El pleno de la Cámara de Diputados aprobó esta madrugada en lo general y en lo particular la reforma constitucional en materia educativa que abroga la impulsada por el ex presidente Enrique Peña y aprobada por el Congreso de la Unión en 2013.
Después de casi siete horas de debate, la Mesa Directiva en el Palacio de San Lázaro turnó el proyecto por segunda ocasión al Senado de la República para su análisis y eventual votación este mismo jueves.
Durante la discusión en lo particular, las fracciones parlamentarias admitieron solo una de treinta propuestas de modificación al dictamen, con el fin de crear un fondo de financiamiento a la educación pública superior.
Previamente, con 396 votos a favor, 68 en contra y una abstención, la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma constitucional en materia educativa con siete cambios, entre los cuales destaca un “candado” adicional para impedir la eventual compraventa y tráfico de plazas del magisterio, así como la garantía de asignación presupuestal la impartición de la educación pública, desde la inicial hasta la superior.
El grupo parlamentario del PAN votó en bloque contra el dictamen, con excepción del coahuilense Evaristo Lenin Pérez, mientras la mayoría parlamentaria de Morena en alianza con el PRI, PES, PT, MC, PRD y PVEM lo hicieron a favor.
La priista Cynthia López, el “verde” Jorge Corona, así como Carlos Morales, diputado sin partido, votaron también en contra, mientras el pesista José Ángel Pérez registró abstención en el tablero electrónico. Las reformas a los artículos 3, 31 y 73 de la Constitución Política confirman la desaparición del Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE), para ser sustituido por un Sistema de Mejora Continua de la Educación, al tiempo de suprimir las evaluaciones docentes y establecer, en cambio, procesos de admisión, promoción y reconocimiento a los maestros, pero sin poner en riesgo su permanencia en el servicio.
Consideran asimismo la obligación del Estado de impartir la educación pública, laica y gratuita desde el nivel inicial hasta el superior, además de sustituir el concepto “educación de calidad” por “educación de excelencia”.
Durante el debate registrado en su sesión extraordinaria y con fotografías de Andrés Manuel López Obrador y Elba Esther Gordillo, la fracción del PAN afirmó que la prisa del gobierno federal por aprobar la reforma educativa tiene la intención de entregarla como regalo del Día del Maestro a la lideresa magisterial.
“Queremos dejar muy claro a la sociedad, a los medios de comunicación, que la única urgencia que hoy tiene el Presidente de la República y Morena por aprobar esta reforma es darle de regalo de 15 de mayo a Elba Esther Gordillo, su reforma educativa”, acusó el legislador panista Felipe Macías.
En respuesta, con pequeñas fotografías de los ex presidentes panistas Felipe Calderón y Vicente Fox al lado de Elba Esther Gordillo, alrededor de 40 diputados de Morena defendieron la reforma educativa en tribuna.
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