SAN DIEGO (AP) — Adam Greenfield estaba en casa recuperándose de un resfriado cuando su novia corrió a avisarle que vehículos de Inmigración y Control de Aduanas estaban llegando a su moderno vecindario de San Diego.
El autor y productor del podcast agarró su iPhone y salió corriendo descalzo, uniéndose a un grupo de vecinos que grababan a agentes enmascarados allanando un popular restaurante italiano cercano, mientras les gritaban que se fueran. Una hora después, la multitud había aumentado a casi 75 personas, muchas de ellas frente a los vehículos de los agentes.
“No pude quedarme callado”, dijo Greenfield. “Fue literalmente afuera de mi puerta”.
Cada vez más estadounidenses presencian cómo arrestan a personas mientras compran, hacen ejercicio en el gimnasio, cenan fuera o realizan otras actividades cotidianas, mientras la administración del presidente Donald Trump se esfuerza agresivamente por aumentar los arrestos por inmigración . A medida que las redadas afectan la vida de personas que no son inmigrantes, muchos estadounidenses que rara vez, o nunca, participaron en actos de desobediencia civil se apresuran a grabar las acciones en sus teléfonos y a organizar protestas improvisadas.
Se están realizando arrestos afuera de gimnasios y restaurantes concurridos.
Greenfield dijo que la noche de la redada del 30 de mayo , entre la multitud se encontraban abuelos, militares retirados, hippies y clientes de restaurantes que llegaban para una cita. Las autoridades lanzaron granadas aturdidoras para obligar a la multitud a retroceder y luego se llevaron a cuatro trabajadores detenidos, añadió.
“Para lograr esto, a las 5 en punto, justo en la hora punta de la cena, en una intersección concurrida con varios restaurantes, intentaban dejar una impresión clara”, dijo Greenfield. “Pero no sé si su intención era transmitir el mensaje como querían. Creo que está generando más reacciones negativas”.
Anteriormente, muchos arrestos ocurrían tarde en la noche o de madrugada cuando los agentes esperaban afuera de las casas de las personas que salían a trabajar o afuera de sus lugares de trabajo al terminar su jornada. Cuando ICE allanó otro popular restaurante en San Diego en 2008, los agentes lo hicieron de madrugada sin incidentes.
El zar fronterizo de la Casa Blanca, Tom Homan, ha declarado que los agentes se ven obligados a realizar más arrestos en las comunidades debido a las políticas de santuario que limitan la cooperación con el ICE en ciertas ciudades y estados. El ICE aplica las leyes de inmigración en todo el país, pero solicita la ayuda de los estados y municipios para alertar a las autoridades federales sobre inmigrantes buscados para su deportación y retenerlos hasta que los agentes federales los detengan.
El vicepresidente JD Vance, durante una visita a Los Ángeles el viernes, dijo que esas políticas han generado “un pequeño problema de moral” en los agentes, “porque el gobierno local de esta comunidad les ha dicho que no se les permite hacer su trabajo”.
“Cuando ese agente de la Patrulla Fronteriza sale a hacer su trabajo, dice que en 15 minutos tiene manifestantes, a veces manifestantes violentos que los obstruyen en la cara”, dijo.
“Fue como una escena de una película”
Melyssa Rivas acababa de llegar a su oficina en Downey, California, un suburbio de Los Ángeles, una mañana de la semana pasada cuando escuchó los gritos despavoridos de unas jóvenes. Salió y las encontró enfrentándose a casi una docena de agentes federales enmascarados que habían rodeado a un hombre arrodillado en la acera.
“Parecía una escena de película”, dijo Rivas. “Todos tenían el rostro cubierto y estaban de pie junto a este hombre, claramente traumatizado. Y había chicas jóvenes gritando a todo pulmón”.
Mientras Rivas comenzaba a grabar la interacción, un grupo cada vez mayor de vecinos les gritó a los agentes que dejaran al hombre en paz. Finalmente, se marcharon en vehículos, sin detenerlo, según muestra el video.
Rivas habló con el hombre después, quien le contó que los agentes habían llegado al lavadero de autos donde trabajaba esa mañana y lo persiguieron mientras huía en bicicleta. Fue una de varias redadas recientes en lugares de trabajo en esta ciudad de mayoría latina.
Ese mismo día, se observó a agentes federales en un Home Depot, una obra en construcción y un gimnasio LA Fitness. No se supo de inmediato cuántas personas fueron detenidas.
“Todos están desconcertados”, dijo Alex Frayde, empleado de LA Fitness, quien dijo haber visto a los agentes fuera del gimnasio y se quedó en la entrada, listo para rechazarlos mientras otro empleado advertía a los clientes sobre el avistamiento. Al final, los agentes nunca entraron.
Comunidades protestan alrededor de los edificios de ICE
Los arrestos en los tribunales de inmigración y otros edificios de ICE también han provocado escenas emotivas, ya que agentes enmascarados han aparecido para detener a personas que acudían a citas y audiencias de rutina.
En la ciudad de Spokane, al este del estado de Washington, cientos de personas se apresuraron a protestar frente a un edificio de ICE el 11 de junio después de que el exconcejal Ben Stuckart publicara en Facebook una publicación. Stuckart escribió que era el tutor legal de un solicitante de asilo venezolano que se presentó en el edificio de ICE y fue detenido. Su compañero de habitación venezolano también fue detenido.
Ambos hombres tenían permiso para vivir y trabajar en Estados Unidos temporalmente bajo libertad condicional humanitaria, dijo Stuckart a The Associated Press.
“Voy a sentarme frente al autobús”, escribió Stuckart, refiriéndose a la camioneta que transportaría a los dos hombres a un centro de detención de ICE en Tacoma. “La comunidad latina necesita al resto de nuestra comunidad ahora. ¡No esta noche, ni el sábado, sino ahora mismo!”
La ciudad de aproximadamente 230.000 habitantes es la sede del condado de Spokane, donde poco más de la mitad de los votantes emitieron su voto para Trump en las elecciones presidenciales de 2024.
Stuckart se conmovió al ver a la cuidadora de su madre entre los manifestantes.
“Ella simplemente me dijo: ‘Estoy aquí porque amo a tu mamá y te amo a ti, y si tú o tus amigos necesitan ayuda, entonces quiero ayudar’”, dijo entre lágrimas.
Al anochecer, el Departamento de Policía de Spokane envió a más de 180 agentes, algunos de los cuales utilizaron balas de pimienta, para dispersar a los manifestantes. Más de 30 personas fueron arrestadas, incluyendo a Stuckart, quien bloqueó el transporte junto con otros. Posteriormente fue liberado.
Aysha Mercer, ama de casa y madre de tres hijos, dijo que no tiene ninguna afiliación política. Pero muchos niños de su barrio de Spokane —que juegan en su jardín y saltan en su trampolín— provienen de familias inmigrantes, y la idea de que se vieran afectados por las deportaciones era inaceptable, dijo.
Dijo que no pudo asistir a la protesta de Stuckart. Pero marchó por primera vez en su vida el 14 de junio, uniéndose a millones de personas en las protestas de “Sin Reyes” en todo el país .
“No creo haberme sentido nunca tan intensamente como en este preciso instante”, dijo.
Con información AP
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