LONDRES (AP) — Una protesta en la ciudad occidental inglesa de Bristol contra nuevas reglas policiales derivó en choques violentos en los que al menos 20 agentes resultaron heridos, dos de gravedad, según dijo la policía el viernes.
Siete personas fueron detenidas en la protesta, que comenzó el domingo por la tarde y se alargó hasta la madrugada del lunes. La policía dijo que la cifra probablemente aumentaría conforme los agentes estudiaran las imágenes tomadas por cámaras de seguridad.
La ministra británica del Interior, Priti Patel, condenó la violencia y describió como “inaceptables” los sucesos, en los que también se dañaron vehículos policiales.
“El vandalismo y el desorden por parte de una minoría nunca se tolerarán”, dijo.
Lo que comenzó como una manifestación pacífica de unas 3.000 personas en College Green, en el corazón de la ciudad, se volvió violento después de que cientos de personas se congregaran ante la comisaría de New Bridewell.
Muchos manifestantes llevaban mascarillas y carteles con lemas contra la nueva ley, como “Diga no al estado policial británico” y “La libertad para protestar es fundamental para la democracia”.
Los manifestantes parecían descargar su indignación contra la Ley de policía, sentencias y tribunales que se está tramitando en el Parlamento. Los términos de la ley, que afecta a Inglaterra y Gales, darían más poderes a la policía para responder a las manifestaciones.
Sue Mountstevens, comisaria de policía y delincuencia en la región de Avon y Somerset, dijo que siete personas habían sido arrestadas pero que habría “muchos más” detenidos.
“Es vergonzoso y escandaloso”, dijo. “Los agentes de policía fueron a trabajar ayer y algunos han vuelto a casa magullados y tras pasar por el hospital”.
Los manifestantes intentaron reventar las ventanas de la fachada de cristal de la comisaría y dañaron 12 vehículos, incluidos dos a los que prendieron fuego.
Doce vehículos policiales sufrieron dañados y la comisaría de New Bridewell sufrió “daños significativos”, indicó Andy Marsh, jefe de policía de Avon y Somerset.
“Los agentes fueron apedreados con piedras y proyectiles y fuegos artificiales y fue una situación terrorífica para ellos”, dijo.
“Creo que los actos de ayer se vieron secuestrados por extremistas, personas decididas a causar daños ilegales, para generar un sentimiento muy negativo contra la policía y agredir a nuestros valientes agentes”, añadió.
Dos de los agentes heridos fueron atendidos en el hospital tras sufrir fracturas de costillas y un brazo. Ambos fueron dados de alta más tarde.
“Todos los agredidos estaban increíblemente conmocionados, algunos fueron golpeados en la cabeza con palos, alcanzados con proyectiles”, dijo Marsh.
El alcalde de Bristol, Marvin Rees, que dijo tener “importantes reservas” sobre la ley, condenó la violencia y dijo que los choques se utilizarían para justificar la legislación.
Uno de los motivos por los que el gobierno británico ha planteado la reforma de las competencias policiales está relacionado con las protestas contra el racismo del pasado verano, que en Bristol incluyeron el derribo de una estatua del comerciante de esclavos Edward Colston.
Con información AP