KIEV (AP) — La batalla de nueve meses por Bájmut ha destruido esa ciudad ucraniana de 400 años de antigüedad y dejado de miles de personas muertas, en una demostración mutuamente devastadora de la estrategia ucraniana de agotar a las fuerzas rusas.
La neblina de guerra hizo imposible confirmar la situación en el terreno el domingo: el Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que, con apoyo de sus fuerzas, el grupo mercenario Wagner había tomado la ciudad. El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, entretanto, insistió en que Bájmut no estaba ocupada por fuerzas rusas.
De cualquier manera, lo cierto es que el valor de la ciudad, para ambos bandos, es más simbólico que estratégico. El indicador más importante del éxito que han tenido las fuerzas ucranianas es el hecho de que han logrado mantener estancados a los rusos allí. Las fuerzas ucranianas buscan agotar los recursos y la moral de las fuerzas rusas en ese pequeño, pero importante trecho de la línea del frente de 1.500 kilómetros (932 millas), mientras se preparan para una importante contraofensiva.
“A pesar de que ahora controlamos solo una parte pequeña de Bájmut, la importancia de su defensa no pierde su relevancia”, expresó el coronel-general Oleksandr Syrskyi, comandante de las Fuerzas Terrestres de las Fuerzas Armadas de Ucrania. “Esto nos da la oportunidad de entrar a la ciudad en caso de un cambio en la situación. Y eso definitivamente ocurrirá”.
A unos 55 kilómetros (34 millas) al norte de Donetsk, la capital regional que está ahora en manos rusas, Bájmut ha sido un importante centro industrial, rodeado de minas de sal y yeso y poblado por unas 80.000 personas antes de la guerra, en un país de más de 43 millones de habitantes.
La ciudad — que llevaba el nombre de Artyomovsk, por un revolucionario blochevique, cuando Ucrania era parte de la Unión Soviética — era conocida por su vino cultivado en cuevas subterráneas. Era popular entre los turistas, por sus anchas y arboladas avenidas, sus parques verdosos y sus imponentes mansiones del siglo XIX.
El foco de los combates más feroces en los meses recientes ha sido el casco urbano de la ciudad, del cual los rusos ya ocupan el 90% según han reconocido los propios comandantes ucranianos. Pero ahora, las fuerzas ucranianas están logrando avances significativos en senderos rurales estratégicos en la periferia de la ciudad, mermando gradualmente los flancos norte y sur de los rusos, a fin de rodear a los miembros del grupo Wagner dentro de la ciudad.
“El enemigo fracasó en su intento de rodear Bájmut. Perdieron parte de las alturas alrededor de la ciudad. El continuo avance de nuestras tropas en los suburbios complica enormemente la presencia del enemigo”, declaró Hanna Maliar, la viceministra de Defensa de Ucrania. “Nuestras tropas han logrado una semi-circunvalación de la ciudad, lo que nos da la oportunidad de destruir al enemigo”.
Los comandantes militares ucranianos dicen que su dilatada resistencia valió la pena porque limitó las capacidades rusas en otros frentes y allanó el camino para los avances ucranianos.
“La idea es agotarlos y entonces atacarlos”, declaró el coronel ucraniano Yevhen Mezhevikin, comandante de una unidad especial que lucha en Bájmut.
Con información AP
Síguenos en nuestras redes sociales
Tu voz en la conversación pública, deja tu comentario de esta noticia
En nuestro compromiso con el periodismo participativo, te invitamos a compartir tu opinión sobre los temas que marcan nuestra realidad: política, seguridad, sociedad y actualidad viral.
Tus comentarios contribuyen a una comunidad informada, crítica y respetuosa.
Por favor, mantén un tono constructivo y evita expresiones ofensivas. La pluralidad de ideas es bienvenida cuando se expresa con responsabilidad.