Helene tocó tierra en Florida como huracán de categoría 4 y desde entonces se degradó a tormenta tropical. Ha sido el huracán más potente que ha azotado el Big Bend de Florida.
Helene es una de las mayores tormentas del último siglo en el golfo de México, con un campo de vientos que podría abarcar aproximadamente la distancia entre Indianápolis y Washington. Unas 60 millones de personas en 12 estados están bajo alertas y advertencias meteorológicas.
Hasta el momento hubo al menos siete muertes relacionadas con la tormenta. Los catastróficos daños causados por los vientos de Helene podrían provocar cortes de electricidad que “probablemente durarán días, si no semanas”, según autoridades. Han cerrado escuelas y comercios y se han cancelado vuelos por el impacto del huracán.
Las velocidades del viento provocado por la tormenta tropical Helene se están reduciendo, mientras avanza por los Apalaches del sur, según el Centro Nacional de Huracanes.
Pero aún está causando estragos en el sureste, el Atlántico medio y el valle de Tennessee con lluvias inundantes. Emergencias raras por inundaciones repentinas están activas en múltiples estados.
Helene ahora tiene vientos sostenidos de 72 km/h, bajando de 97 km/h esta mañana. Los vientos de la tormenta seguirán debilitándose y podría convertirse en una depresión tropical o un ciclón post-tropical más tarde hoy.
Con información CNN
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