Las autoridades estatales están trabajando con grupos civiles en la zona para ayudar a coordinar un retorno seguro de estas familias
Los recientes enfrentamientos entre los grupos criminales Gente Nueva y La Línea, iniciados el 24 de junio de 2021, obligaron a 127 familias a abandonar sus hogares en varios municipios de la zona rural de Chihuahua.
Las autoridades estatales están trabajando con grupos civiles en la zona para ayudar a coordinar un retorno seguro de estas familias, que ahora se encuentran legalmente en una situación conocida como desplazamiento forzado interno (DFI).
Las cifras oficiales muestran que 525 personas de la zona han solicitado asistencia y más de la mitad de ellos (55,62%) eran mujeres. Las cifras establecen que el 71 por ciento de las víctimas son de Guadalupe y Calvo, es decir, 373, seguido de Uruachi con 43; Saucillo con 35; Balleza de 29; Madera con 11; Cuauhtémoc con 9.
Tres municipios del vecino estado de Durango también solicitaron ayuda a las autoridades del estado de Chihuahua. Tres personas eran de Pueblo Nuevo, 7 eran de Los Lirios y 11 eran de Guanacevi.
Guadalupe y Calvo limita con el estado de Sinaloa y se cree que es un territorio controlado por Gente Nueva, una facción del Cártel de Sinaloa. Este municipio es parte del Triángulo Dorado y tiene grandes regiones de cultivo de adormidera. Además de la producción de drogas, la tala ilegal también es una actividad rentable disputada por los cárteles de la droga en la zona.
Funcionarios de la Agencia Estatal de Investigaciones (AIC) confirmaron que los enfrentamientos en la zona comenzaron el 24 de junio cuando La Línea, ex grupo paramilitar del antiguo Cártel de Juárez, hizo una incursión a Guadualupe y Calvo en un esfuerzo por tomar el control del territorio de Gente Nueva. Testigos presenciales dijeron que más de 40 personas murieron ese día.
Aunque en los noventa la organización criminal del Cártel de Juárez era considerada la mayor de América, en la actualidad su fuerza está muy disminuida, fundamentalmente por la lucha que sostuvo desde 2005 con el Cártel de Sinaloa, dirigido entonces por Joaquín el Chapo Guzmán.
Actualmente la organización criminal opera como un jugador regional. Buena parte de su brazo armado, La Línea, quedó demolido entre 2010 y 2011, con la detención de uno de sus líderes.
Con información Infoabe