La nueva escudería ya sabe que si incorpora al mexicano le daría unos beneficios que no tendría con otros pilotos que están en el mercado.
Cadillac ya calienta motores de cara a su estreno en la Fórmula 1. En los últimos días salen muchas informaciones sobre quienes serán los pilotos que ocupen los dos asientos que darán derecho a competir en el Gran Circo desde 2026. Uno de los que aparece como favorito es Checo Pérez, que sigue sin aclarar su futuro. Ni ha confirmado que vaya a seguir en la F1, ni tampoco que se haya acabado su carrera como piloto. Simplemente se está tomando unas semanas de tranquilidad a la espera de desvelar qué hará.
Lo que nadie puede discutir es que con los nombres que hay sobre la mesa como posibles pilotos de Cadillac, ninguno tiene el caché de Sergio Pérez. De los que suenan y tienen más experiencia no hay ninguno que haya demostrado ser más rápido que el mexicano. Ni Ricciardo, ni Bottas, ni Tsunoda, no Zhou. Checo ha demostrado todos estos años en Red Bull ser uno de los mejores del Gran Circo.
Después están las apuestas más arriesgadas y jóvenes como Colton Herta, Alex Palou o Patricio O’Ward, pilotos que apuntan a grandes proyectos, pero ninguno con la fiabilidad de alguien como Checo, que tiene una trayectoria envidiable en la Fórmula 1.
La última palabra
Por eso, por mucho que Cadillac filtre muchos nombres, parece muy claro que Sergio Pérez será quien decida si quiere o no competir con esta escudería en 2026. Sin duda, es la mejor opción. Otra cosa distinta es que no se pusieran de acuerdo en las condiciones o en las temporadas, pero no hay otro piloto con el palmarés y la experiencia de Checo, además de todo lo que arrastra en el mercado mundial, especialmente en el latino.
Checo sería un seguro de vida para Cadillac. El impacto de su fichaje sería tremendo y el morbo de volver a verle compitiendo contra gente como Verstappen o Lawson supondría un empujón definitivo para la irrupción de la escudería en ese 2026.
Por todo esto, en principio, Checo no debería tener rival para ir a Cadillac si fuera su deseo. Otra historia es si son capaces de llegar a un acuerdo o no, pero no hay mejor opción para esta nueva escudería que un subcampeón del mundo como el mexicano. Tanto el piloto como la marca saldrían tremendamente beneficiados con esta unión, de eso no hay duda.
Con información Marca
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