Alrededor de 4 mil elementos del Ejército y la Marina tienen a su cargo ya la seguridad, que incluye revisión minuciosa y acceso controlado de empleados.
En la refinería Antonio M. Amor, en Salamanca, desde ayer alrededor de 66 militares custodian los accesos del inmueble y revisan minuciosamente a los empleados, a quienes solo les permiten la entrada con su identificación. Con este propósito, otros 800 militares y marinos también vigilan el municipio de Valle de Santiago (300) y la zona de Pénjamo (500, de los cuales 200 pertenecen a la Secretaría de la Marina), además de los policías federales que ya recorren las carreteras.
En la refinería Antonio Dovali Jaime, en Salina Cruz, Oaxaca, se confirmó la presencia de 500 soldados para vigilar el ingreso y salida de pipas con combustible. Al encabezar la reunión de seguridad estatal, el gobernador Alejandro Murat aseguró que ayer se robusteció el blindaje de las instalaciones estratégicas de Pemex en Oaxaca con la presencia de efectivos del Ejército.
Otra refinería cuya seguridad quedó en manos de la Marina fue la Francisco I. Madero, en Tamaulipas; allí, desde las 5 de la mañana de ayer, los marinos implementaron un operativo especial que incluyó sobrevuelos en helicóptero.
Se estima que para estas instalaciones se dispuso de 79 elementos, pero a Tamaulipas llegarán 171 efectivos de Sedena y Marina para cuidar el inmueble y las estaciones de bombeo; también se distribuyó personal militar en las subestaciones de González, Zaragoza, Ciudad Victoria y Reynosa. Otros 200 militares asumieron el control de la refinería Lázaro Cárdenas, en Minatitlán, Veracruz, los que se suman a los marinos y soldados que desde hace varios años resguardan este inmueble.
Sin detallar cuántos uniformados fueron asignados, los directivos de la refinería recibieron un oficio en el que se les notificó que para dar cumplimiento a un mandato de la Presidencia, a partir del 5 de enero se contaría con presencia de personal de la Sedena.
Los trabajos de los soldados se harán en coordinación con la Salvaguarda Estratégica, antes llamada Seguridad Física, de Pemex.
Elementos del Ejército ya resguardan también la refinería de Cadereyta, en Nuevo León. Manuel González Flores, secretario general de Gobierno, confirmó que la medida de resguardo se implementó desde la tarde del domingo pasado.
Dijo que por lo menos 63 soldados se ubican en la sede de la refinería de Pemex ubicada en Cadereyta:“Ya se tomó posesión y ya se está protegiendo por parte del Ejército, eso fue ayer (domingo) en la tarde, me anunciaron hoy (lunes) en la mañana, son 63 elementos de la Séptima Zona Militar.
Sin embargo, en la refinería Miguel Hidalgo, en Tula, Hidalgo, no se ha contemplado un refuerzo militar al destacamento ya existente, que asciende a 20 militares, confirmó la representación regional de Comunicación corporativa de la empresa petrolera.
Las acciones de vigilancia se implementaron también en la terminal de Almacenamiento y Despacho Marítimo de Pemex en Tuxpan, con 80 elementos nuevos, que fue incluida entre las instalaciones contempladas en la estrategia para combatir el huachicoleo.
También se reforzó la seguridad en seis instalaciones petroleras más ubicadas en Tierra Blanca, Poza Rica, Medellín de Bravo, Juan Díaz Covarrubias, Ixtaczoquitlán y Fortín de las Flores.
En tanto, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, informó que se reforzaron las tareas en materia de seguridad en todas las estaciones de abastecimiento de Pemex en la entidad, con la participación del Ejército.
Esta medida también se aplicó en Querétaro, donde personal castrense tomó el control de la Terminal de Almacenamiento y Despacho de la ciudad.
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Con información de Jannet López Ponce, Oscar Rodríguez, Anahí Meza, Isabel Zamudio , Eduardo Mendieta, Monserrat Mata y Estrella Álvarez
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