El futuro de Sergio Pérez apunta a su regreso a la Fórmula 1 junto a Cadillac. Las últimas noticias sitúan al piloto mexicano como uno de los grandes favoritos para ocupar el asiento de esta escudería que quiere entrar a lo grande en la competición en 2026.
Hasta que todo se confirme, tanto lo de Cadillac como, lógicamente, lo de Checo, la gran duda que puede tener el piloto mexicano es cómo mantenerse en perfectas condiciones para afrontar el nuevo reto. Y ese es el gran dilema.
Checo acabó su etapa con Red Bull el pasado mes de diciembre y, lógicamente, en enero y febrero se ha dedicado sobre todo a disfrutar de su nueva situación, de estar con su familia y olvidar estos últimos años tan duros que ha vivido en Red Bull.
Pero la gran duda es saber si en caso de regresar a la Fórmula 1 estar tanto tiempo parado es lo más recomendable o debería buscar alternativas en otras competiciones para no perder el ritmo de conducción. Además, una cosa es entrenar y otra muy distinta es competir.
¿Fórmula E?
Una solución, tal y como ya se ha apuntado en alguna otra ocasión, sería la Fórmula E. Está claro que estar muchos meses alejado de la alta competición puede ser también un problema grave para Sergio Pérez.
Y más para alguien con 35 años que lleva mucho tiempo entre los mejores. Un parón prolongado siempre tiene mucho peligro porque podría provocar que Checo se alejara demasiado del alto nivel, que se relajara y después le costara un mundo recuperar su mejor nivel.
Pero el dilema para Checo está ahí si decide seguir con la Fórmula 1. Ponerse las pilas desde este mismo momento o esperar a que se confirme su fichaje por Cadillac para regresar al Gran Circo. La última palabra la tiene él.
Con información Marca
Síguenos en nuestras redes sociales
